Otros detalles sobre extradición Fujimori a Perú

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Un manifestante grita consignas contra el ex presidente peruano Alberto Fujimori (1990-2000), en una manifestación hacia la embajada de Chile en Lima, el pasado 17 de julio. - - La justicia chilena tiene previsto dictar este viernes un fallo inapelable sobre la solicitud de extradición del ex presidente peruano Alberto Fujimori, el hombre que renunció a la presidencia por fax desde Japón y que ahora es reclamado por violaciones de los derechos humanos y corrupción. Fujimori, quien estuvo varios años refugiado en Japón aprovechando su doble nacionalidad, fue detenido en Chile en noviembre de 2005 y semanas después Perú pidió su extradición. En un intento por escapar a un proceso el ex presidente fue incluso candidato a senador en las elecciones japonesas de julio. El director del Departamento de Comunicaciones del Poder Judicial, Cristián Fuenzalida, indicó el jueves en Santiago que este viernes será dado a conocer el fallo sobre Fujimori, quien ejerció la presidencia entre 1990 y 2000. Horas después Alberto Chaigneau, presidente de la Segunda Sala Penal de la Corte Suprema, encargada de revisar el caso, ratificó la versión aunque dejó entrever la posibilidad de una postergación. "Yo quiero que salga" el fallo este viernes "y estamos trabajando en eso, pero ustedes comprenderán que 25.000 fojas no son fáciles de revisar", dijo el magistrado dejando abierta la puerta a una eventual postergación. Los cinco jueces de la Segunda Sala tomaron una decisión el 10 de septiembre pero la mantuvieron en secreto hasta tanto no estuviera redactado el fallo y hubiera sido firmado por cada uno de sus integrantes. En caso de extradición Fujimori --actualmente está bajo arresto domiciliario en Santiago- debería ser enviado de regreso al Perú en un plazo que va de un día a tres meses. "No confío en que mi padre va a tener un proceso justo", advirtió desde Lima la congresista Keiko Fujimori, hija del ex presidente. "Siempre he sostenido que así él gane el proceso de extradición, yo espero que todavía no regrese a Perú hasta que se den todas las condiciones y pueda recibir un proceso justo para hacer las aclaraciones correspondientes frente a los cargos que se le han formulado", aseveró. Pero José Miguel Vivanco, representante de Human Rights Watch (HRW), dijo a la AFP que "hoy día las autoridades peruanas en el ámbito judicial han recobrado niveles de independencia y autonomía que no tuvieron durante el régimen de Fujimori". "Creo que Fujimori tiene garantizado un debido proceso en Perú", añadió. La expectativa en Lima es muy fuerte pues una eventual extradición de Fujimori generaría un verdadero remezón en la actividad pública peruana, ya que el ex presidente cuenta con un importante caudal político, con 13 congresistas entre los 120 miembros del unicameral Congreso. Esos 13 congresistas han ayudado en varias ocasiones al gobernante APRA, del presidente Alan García, a conseguir la mayoría necesaria en la aprobación de leyes. Fujimori es reclamado en su país por dos cargos de violaciones a los derechos humanos y 10 por actos de corrupción. Las acusaciones mayores son por las matanzas de La Universidad de la Cantuta y de Barrios Altos, en ambos casos en Lima, que costaron la vida a 25 personas en 1991 y 1992. Estos actos fueron ejecutados por un escuadrón del ejército denominado Grupo Colina durante la guerra interna contra la guerrilla maoísta Sendero Luminoso. La justicia peruana acusó a Fujimori de tener responsabilidad en ambos hechos como coautor de los delitos de homicidio calificado, tortura y desaparición forzada de personas, considerados de lesa humanidad. Fujimori tuvo un ingreso fulgurante a la política peruana en 1990. Ingeniero con especialidad en matemáticas y profesor universitario poco conocido, sedujo al país con su mensaje de desprecio hacia los políticos tradicionales, derrotando al archifavorito, el escritor Mario Vargas Llosa. Conocido por su autoritarismo, Fujimori ejerció el poder con mano dura apoyándose en las Fuerzas Armadas, su principal soporte durante su gobierno, en cuyo transcurso otro grupo guerrillero, el Movimiento Revolucionario Tupac Amaru tomó por asalto la residencia del embajador japonés en Lima y retuvo rehenes durante meses, crisis que finalizó con un sangriento asalto militar. Autor:Eitan Abramovich (afp.com)21/09/2007