 |  | Max Seitz BBC Mundo, Argentina |
Luego del triunfo de la primera dama y candidata oficialista Cristina Fernández en las elecciones presidenciales de octubre, una seguidilla de aumentos ha golpeado el bolsillo de los argentinos.
No me parece adecuado que suban ahora (los precios de los alimentos), una vez que ya ganaron las elecciones. Es como arrojar una bomba 
Por un lado, han continuado los casi diarios incrementos en los precios de los alimentos, y los economistas aseguran que la canasta básica es actualmente un 20% más cara que hace algunos meses.
Por el otro, en semanas recientes se han registrado alzas de hasta el 30% en ls tarifa de taxis, seguros, cuotas de escuelas privadas y servicios de salud, y se esperan más aumentos en los combustibles.
Pero los incrementos no se han quedado ahí. El gobierno del presidente Néstor Kirchner anunció recientemente la aplicación de mayores impuestos a la exportación de trigo, maíz y soja (la principal fuente de ingresos del país).
Esto desató la protesta del sector agropecuario. Pero el ministro de Economía, Miguel Peirano, aseguró que la medida intentaba proteger a los consumidores.
"Impide que la suba (el alza) de los precios internacionales de los granos tenga impacto en el mercado interno", explicó el funcionario.
El mal humor de los argentinos por el "tarifazo" post-electoral es notorio en las calles de Buenos Aires. "Los mayores aumentos se han visto en productos frescos como frutas, verduras y carnes", se quejó a BBC Mundo Alberto, un empleado porteño.
"No me parece adecuado que suban ahora, una vez que ya ganaron las elecciones. Es como arrojar una bomba", opinó por su parte la jubilada Matilde.
Transición
¿Pero por qué el gobierno permite todos estos aumentos de precios durante la transición entre la gestión de Kirchner y la de su esposa?
El economista independiente Sergio Berensztein dijo a BBC Mundo que buena parte de los ajustes se han realizado antes de la asunción de Fernández, el 10 de diciembre, "para evitarle el desgaste".
"El gobierno ha implementado políticas de control de precios que han fracasado porque la inflación es inevitable en una economía como la Argentina, que en los últimos años ha crecido a un ritmo anual del 8%, y ahora tiene que sincerar los precios en rubros que han quedado rezagados".
"Esto recién empieza y hay que evitar que la situación se vaya de las manos", agregó Berensztein.
La administración de Kirchner niega haber postergado las alzas para después de octubre por razones electorales e insiste en que sus políticas intentan equilibrar la economía.
Lo cierto es que la inflación es un tema muy sensible en Argentina. Aquí pocos olvidan la hiperinflación que en 1989 sumió al país en el caos. ¿Pero puede repetirse la historia?
El economista opositor Carlos Melconian se encargó de espantar los fantasmas del pasado: "Argentina no está ante un desborde. La situación puede controlarse perfectamente, pero Kirchner tiene que reconocer que tiene un problema y arreglarlo".
Medición polémica
El gobierno afirma que el alza de precios ha sido del 9% en el último año, mientras que algunos especialistas dicen que ha sido mucho mayor
Melconian se refería a la polémica en torno de la medición de la inflación en Argentina. El gobierno afirma que el alza de precios ha sido del 9% en el último año, mientras que algunos especialistas dicen que ha sido mucho mayor.
La oposición sostiene que el oficialismo "manipula" las cifras del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) para ocultar la verdadera dimensión del problema, algo que la administración de Kirchner ha negado.
Resolver esta discrepancia será, sin duda, uno de los desafíos que enfrentará el gobierno de Cristina Fernández.
Por lo pronto, el ministro Peirano adelantó que no seguirá al frente de la cartera de Economía a partir del 10 de diciembre, por discrepancias sobre el manejo del caso Indec.
Lo que pocos argentinos dudan es que los salarios no han crecido al mismo ritmo que la inflación. Recomponer los sueldos será, según admitió la propia Fernández, otro de los retos del próximo gobierno.
"Cristina ha planteado un pacto social entre capital y trabajo para contener la inflación e impedir que los ingresos sigan perdiendo terreno", explicó Berensztein a BBC Mundo.
"Esta propuesta intenta que todos salgan ganando, algo que por el momento ha sido muy difícil de poner en práctica en Argentina".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario